Cómo hacer una habitación Montessori

Uno de los aspectos que más me gusta en la filosofía montessori es el ambiente preparado. La habitación Montessori es, muchas veces, la puerta de entrada de muchas famílias al «mundo Montessori». Al menos, fue así que pasó con mi familia. Hay muchos posts y vídeos en redes sociales sobre la habitación Montessori y mucha gente puede sentirse confusa cuando está empezando, por eso en este post te explicaré cómo hacer una habitación Montessori.

El ambiente es, para Maria Montessori, un «profesor» más. Son necesarios tres elementos para que el desarrollo de un niño ocurra: un adulto preparado, el ambiente preparado y él mismo.

Es a partir del ambiente que el niño aprende, relacionándose con él y con los objetos que allí están. Así que es muy importante tener un cuidado especial con el espacio que nuestro hijo está.

La habitación es el espacio principal del individuo en una casa, es su rinconcito, donde no solamente dormirá pero también vestirse, leer cuentos con mamá y papá y trabajar. Por eso es muy importante tenerlo condicionado de tal manera que facilite el desarrollo.

La habitación Montessori del bebé

Maria Montessori decía que la cuna es una prisión, donde el bebé está sin poder moverse. Su propuesta de habitación para el bebé consistía en un colchón en el suelo para que el bebé pueda ejercitar los movimientos naturales de girar, reptar etc.

El colchón va directamente en el suelo, sin ningún tipo de barrote que impide el movimiento del niño. También se puede colocar una pequeña estantería muy baja, a la altura de la vista del bebé, con muy pocos elementos, quizás algún cuento de tela y una pelota blandita.

Otros elementos son cuadros de escenas de la naturaleza y un espejo en una pared también a la altura del bebé para que él pueda mirarse a sí mismo. Además de una barra de madera para que pueda agarrarse cuando llegue el momento en que esté listo para colocarse de pie.

Es importante que la habitación Montessori sea lo más sencilla posible. Pocos muebles y juguetes. Algo muy minimalista, nada de colores fuertes en las paredes o de dibujos de personajes. Tampoco móviles con luces o sonidos. Los móviles Montessori son muy sencillos, con formas geométricas, como en la foto abajo:

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Foto: How We Montessori

Muchos padres, que desean una habitación Montessori para sus hijos, acaban pecando con excesos, pintando las paredes con colores fuertes, colocando una especie de casita alrededor del colchón o muchos peluches. Nada de eso es necesario. Incluso puede perjudicar el libre desarrollo del bebé.

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Observe esta habitación: la mesita con ositos impide que el niño pase por allí. Las almohadas en forma de cilindros, colocadas para proteger, lo que hacen es perjudicar el movimiento libre del bebé. La casita alrededor y las bollas son totalmente desnecesários

Es importante estar muy convencido de la idea de la habitación y sus funciones. En mi opinión personal, si no estás convencido, es mejor que no lo hagas. Soy de las que piensan que es mejor no hacer algo que hacerlo de mala manera. Siempre se puede hacer la habitación Montessori más adelante, con sus adaptaciones. Siga tu instinto.

La habitación del niño de 18 meses a 3 años

A partir de los 18 meses, aproximadamente, el niño pasa a ser un toddler, es decir, ya se mueve, se pone de pie, quizás incluso ya sepa caminar solo. La habitación Montessori cambia: el niño pasa a tener una pequeña mesa y una silla de acuerdo con su tamaño para trabajar.

Es posible colocar más objetos (pero no muchos! 🙂 ), una pequeña librería con sus cuentos favoritos, los cuadros suben un poco para estar a su altura. El colchón en el suelo sigue, pero desaparecerá cuando el niño ya pueda subir y bajar solo, algo que puede ocurrir a los dos años, aproximadamente. Entonces, será sustituído por una cama baja.

El objetivo de la habitación Montessori es estimular la autonomía del niño. Él no quiere depender del adulto. Los padres deben reconocer eso y respetar su voluntad, pues un niño autónomo es un niño más feliz y seguro de sí mismo. Será un niño que buscará su crecimiento personal siempre.

En el mismo blog How We Montessori encontramos la ilustración abajo para la habitación de 18 meses a 3 años:

infant room

Sigue siendo minimalista, sin muchos estímulos, sin cajas de juguetes a rebosar, sin arcas que solo sirven para que el niño saque todo (tirando al suelo, por supuesto) hasta encontrar lo que está buscando… los objetos son representaciones del mundo real, bellos, muchas veces de madera.

En esta edad, el niño está en primer plano de desarrollo o Mente Absorbente. Está enamorado del mundo real. Desea conocerlo más que todo. Por eso, es importante que su ambiente sea enriquecido con elementos del mundo real, el que está al alcance de sus manos.

Algunas sugestiones de objetos para su habitación son un pequeño CD player (o altavoz de Ipod si ya no tienes CD´s en casa; nosotros sí tenemos!), algún instrumento musical de madera (mejor de percusión, pues a esta edad le encanta golpear todo) y una flor de verdad en un pequeño florero. También son interesantes los puzzles de madera, los más sencillos que encuentres, de esos de tirar por botones.

Es importante recordar que siempre hay que dejar que entre luz natural en la habitación, intenta evitar la luz artificial.

No hay materiales Montessori en las ilustraciones de ejemplo. No es necesario tenerlos en casa. Si quieres tener un espacio homeschooling, es recomendable que esté en una habitación a parte, para que el niño no utilice los materiales de una manera indebida.

¿Te ha gustado? Te aconsejo que eche un vistazo en los posts de How We Montessori, es uno de los mejores blogs que hay sobre Montessori en casa, en mi opinión. Kylie, la bloguera, tiene tres hijos, vive en Reino Unido y sigue la filosofía Montessori hace años. Es todo un lujo aprender con ella.

Si te ha gustado este post agradezco que lo compartas para que Nuestros Momentos Montessori llegue a más familias.

Post actualizado el 31.12.2019

Alessandra Mosquera
nuestrosmomentosmontessori@gmail.com

Alessandra Mosquera es periodista, asistente Montessori AMI 3 a 12 años y educadora de Disciplina Positiva para famílias y maestros formada por la PDA. Vive en Madrid, España, hace 18 años con su marido Ernesto, su hijo Izan y Moon, su perro Jack Russell. Le encanta pasar las tardes viendo una película con sus chicos con una mantita y un bol de palomitas.

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